
La futura autopista entre Abidjan y Lagos se perfila como la columna vertebral del comercio en África Occidental. El trazado recorrerá cinco países costeros —Costa de Marfil, Ghana, Togo, Benín y Nigeria—, conectando a decenas de millones de personas con los principales puertos y mercados de la región.
El proyecto arrancará en 2026 con un calendario que apunta a su finalización en 2030. La vía tendrá entre cuatro y seis carriles en la mayor parte de su recorrido, mientras que el acceso a Lagos se ampliará hasta ocho. El plan también incluye enlaces viales y puestos fronterizos modernizados para evitar demoras que hoy ralentizan el transporte transnacional.
La iniciativa está coordinada por la Comunidad Económica de Estados de África Occidental, con el respaldo del Banco Africano de Desarrollo y otros socios financieros. Se prevé la creación de una autoridad de gestión específica con sede en Abidjan, que velará por la operación, el mantenimiento y la armonización de normas entre los cinco países.
Más allá de la infraestructura, la autopista busca catalizar la integración regional. La población urbana de este corredor se multiplicará en las próximas décadas y la carretera ofrecerá a pequeñas y medianas empresas acceso a mercados más amplios y competitivos. Se espera que la obra genere miles de empleos directos e indirectos, tanto en la construcción como en la cadena de servicios asociada.
El presupuesto estimado supera los 12.000 millones de dólares, cifra que subraya la magnitud de la apuesta. Resolver los retos financieros y aduaneros será determinante para que la autopista cumpla su promesa: convertirse en un motor de industrialización, agricultura y comercio que acerque la zona al espíritu del Área Continental Africana de Libre Comercio.
Fuente: afdb.org; constructafrica.com